En la nube.

Estoy intoxicada, necesito sudar ésta energía errónea acumulada por la respiración de aires contaminados. Deberías hacer cura tu también. Ponte a pensar dónde pisan tus pies, las rozaduras te hablarán del camino y la sonrisa te recordará de lo aprendido en él. Hoy sentí ganas de reír contigo, mis ganas son ilusiones que sólo se quedarán aquí. No hay sonidos, las pausas... ¿o el punto final? Aquí palabras, dentro de mí; paciencia; nadie es mejor que nadie. Se es la esencia, eso nos hace únicos... ¿no sabes cual es ese perfume? El olor a uno mismo. Declarar nuestras inseguridades no nos hace débiles, nos hace sabios porque conocemos y aceptamos el ser que somos. Y no me refiero a declarar en público, sino a ser honesto con tu propia alma que es, a la que al fin y al cabo... le duele. La mía me ha dolido a ratos durante éstas últimas semanas pero estoy tratando de que mejore hasta terminar caminando solita sin tropezar, te miento... me sigue doliendo. Desde que no estás.

Escucha la melodía y siente lo que tu conciencia tiene que decir.