martes, 8 de agosto de 2017

Antes de morirme.

Luna llena en mi balcón. No hago otra cosa que recordarte en todo momento. No puedo dejar de lado cada pensamiento o deseo que me atrapó en esta adición a tu piel. Es cerrar los ojos y tocarme pensándote. No fui lo suficientemente fuerte para evitar fumarme ese porro olvidado en el mueble del salón. Quizás no he querido ser tan tonta de dejar pasar una ocasión que lo merece. La sensación de trasladarme al placer completo imaginándome entre tus brazos, rememorando cada una de las caricias que hay repatriadas por cada rincón de mis paredes. Y me amo, me amo por mi, me amo por ti y por nuestros recuerdos; nuestras risas,caricias,canciones e infinitas conversaciones hasta alguna que otra vez, amanecer. Y en esos amaneceres alimentarnos desayunándonos en plena libertad bajo el cielo. Regocijarnos en los deseos, fluir y mezclarnos, conocernos y a pesar de todo seguir amándonos.
Luna llena que me recuerda a ti. Me gustaría que fuesen tus manos y no las mías las que mimasen mi piel pero... sigo. Creo que te huelo, que mi tacto empieza a creer que eres tú. Y sí, eres tú que estás en mi. Sigo, sigo disfrutando del estado en el que estoy flotando y con sensación de felicidad. Soy afortunada por vivir lo mejor y lo peor hasta apreciar intensamente la bonita vida que vivo.
Creo que te huelo, Que mi tacto empieza pensar que te toca, que te ama..
¿Sabes?no puedo negarme a tenerte de alguna forma presente. Realmente de cualquier forma estaría bien aunque no te tenga pero te sienta.
Luna llena que me ha llenado de una energía preciosa que invierto en pensamientos de amor hacia ti. Y me toco y mis latidos son rápidos y ansiosos. Y me gustaría acariciar tu carne y saciar esta sed con tu saliva. Hoy tengo mucho que darte, de todo lo que guardé y sin palabras. Me basta mirarme en tus ojos y encontrarme en ellos. Puedo ser clara y directa, libre y loca. Puedo ser dulce y honesta pero también puedo ser escandalosamente una mujer de instinto salvaje. Podría hacerte sangrar los labios de tanto besarlos y morderte desde el cuello hasta el ombligo. Tal vez después fuese más suave. En fin, ya te cuento otro día, acabo. Ya casi está apunto de amanecer y voy mejor a dormir y soñarte. Soñar que te como y que me comes. ¡Desayunándonos!

Lorena Picón.


1 comentario:

Unknown dijo...

Esto no es ningún royo.

Cada luna llena que pasa te intento retener en mis sueños para encontrar una explicación a todo lo que pasó entre nosotros.

Y allí, solo allí es donde convergemos eternamente.

Gracias.